En el Bhagavad-gita tal como es 7.11, Bhaktivedanta Swami traduce y comenta así:
«Yo soy[1] la fuerza de los fuertes, desprovista de pasión y deseo. Yo soy la vida sexual que no va en contra de los principios religiosos, ¡oh, señor de los Bharatas [Arjuna]!
La fuerza del hombre fuerte se debe aplicar para proteger al débil, no para la agresión personal. Así mismo, de acuerdo con los principios religiosos (dharma), la vida sexual debe ser para tener hijos, y no para alguna otra cosa. Los padres tienen, entonces, la responsabilidad de hacer que sus hijos se vuelvan conscientes de Krishna.
La traducción literal de la estrofa es:
Yo soy la fuerza de los fuertes, desprovista de pasión y deseo. En los seres soy el deseo que no es contrario al dharma, oh tú el mejor de los Bharata.
balam – fuerza.
balavatām – de los fuertes.
ca – y.
aham – yo => yo soy.
kāma-rāga-vivarjitam – desprovista de deseo y pasión.
dharma-aviruddhaḥ – no contrario al dharma.
bhūteṣu – en los seres.
kāmaḥ – deseo.
asmi – soy.
bharatarṣabha – toro de los Bharata, oh tú el mejor de los Bharata, epíteto de Arjuna.
En su traducción, el Swamiji omite la palabra bhūteṣu (en las criaturas) y traduce haciendo referencia solo a los humanos, quienes son ciertamente los que siguen religiones. Pero ya que bhūteṣu incluye a los animales, “principios religiosos” no es una traducción adecuada para dharma[2]. ¿Qué significa dharma en este contexto? Ley natural para el equilibrio.
Y aquí, la palabra kāmaḥ (el deseo) se refiere a los deseos lícitos, como los que tienen por fin la conservación del cuerpo y de la especie.
Se sabe que la finalidad biológica del sexo es la reproducción[3], así como se sabe que la finalidad de la comida es la nutrición. Sin embargo, el comentario del Swamiji es rígido, dogmático, y resulta impráctico en esta era. Y esto lo saben los hare krishnas, los monjes “brahmacharis” mal humorados. El impulso sexual en esta era es tan intenso que hasta santones como Yamunacharya[4] se han visto más o menos perturbados por este. A menos que el pensamiento esté muy en la bondad (sattva), el hombre casi no piensa en la reproducción, sino más en la complacencia. Del mismo modo, no siempre que se piensa en comida es para calmar el estómago o el hambre, puesto que hay postres como el laddu, bebidas, etc. Por ejemplo, en el Bhagavata-purana[5] se dice que Rama (Balarama, hermano de Krishna) tomaba licor varuni acompañado de mujeres jóvenes.
Por otro lado, leemos que el sabio Kardama, para complacer a su esposa[6] Devahuti, que estaba deseosa por relación sexual (surata-utsukam) disfrutó con ella por años, que pasaron como si fueren un momento. (Bhag. 3.23.44). Después, engendró nueve hijas, y un hijo llamado Kapila.
En la leyenda del rey Pururava, éste se enamoró de Urvasi, con la cual tuvo disfrute amoroso, complacencia o relación sexual (ratih, riramsaya, samramsye, maithunat, samuvasa). Sin embargo, esta relación amorosa no fue solo color de rosas, pues él sufrió cuando ella lo abandonó. Aun así, volvió a encontrarla, y por el deseo de seguir con ella, realizó yajña (oficio sagrado) dedicado al Señor Hari, y así logró alcanzar el planeta celestial de los Gandharvas, de donde era oriunda su amada Urvasi. (Bhag. 9.14.17–49). La moraleja aquí es disfrutar moderadamente, sin apasionamiento, y realizar el yajña sin descuido.
También en estas Escrituras se menciona a las cortesanas[7]. Desde la antigüedad la cortesana ha existido para dar complacencia recreativa y momentánea al hombre. ¿Cuanto más no puede dar una querida esposa?
Sin embargo, las Escrituras hacen énfasis en que el entregarse a la complacencia sin moderación[8] alguna, hace caer incluso a los sabios. En el Bhagavad-gita (3.5-6) se dice que nadie permanece estático, todos estamos impulsados a la acción debido a las modalidades de la naturaleza material. El hombre que intenta controlar sus órganos sensoriales pero sus pensamientos están en los objetos sensuales, es un tonto, un farsante. En cambio, es mejor la persona sincera que disciplina sus sentidos mediante el karma-yoga, sin apegarse a los resultados.
Pero la represión del deseo puede llevar a la promiscuidad, los abusos sexuales[9], etc., cuyo resultado es el sufrimiento (duhkha).
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1 “Yo soy” (aham en sánscrito) significa que la fuerza y el deseo son principios del Ser Cósmico (purusa). Estos principios, filtrados por las gunas (modalidades) sattva (pureza, conservación), rajas (volatilidad, pasión) y tamas (oscuridad, inercia, etc.), son expresados como cualidades de los seres vivos. Los deseos sensuales de una persona situada en sattva son más puros, los de alguien con inclinación a rajas son más carnales, y los de uno inclinado a tamas son más torpes, sombríos.
2 Etimológicamente la palabra sánscrita dharma viene de la raíz dhr que significa “sostener”, “mantener”. Dharma es aquello mediante el cual algo se mantiene firme. En otras palabras, dharma es el principio o la ley natural que proporciona equilibrio. Ciertamente, el amor, p. ej., es uno de esos valores del dharma. Lo contrario al dharma es el adharma, el desequilibrio, caracterizado por la iniquidad, la codicia, etc.
3 En el Bhagavata-purana (3.12.54-55) se dice Manu y su mujer tuvieron relación sexual conforme al dharma (mithuna-dharmena) para procrear. Esta maithuna-dharminah también incluye a los animales: “al ver a un majestuoso pez apareándose o teniendo relación sexual conforme al dharma”. (Bhag. 9.6.39).
4 En el Bhagavad-gita Tal Como Es 2.60, se cita un dicho de Yamunacharya (916–1060 d. C.): yad-avadhi mama cetah krsna-padaravinde… “Desde que mi mente se ha dedicado al servicio de los pies de loto del Señor Krishna y he estado disfrutando de un humor trascendental nuevo a cada paso, cuando quiera que pienso en la vida sexual, vuelvo la cara al instante y escupo en el pensamiento”.
5 “Allí vio a Shri Balarama, el Señor de los Yadus, adornado con una guirnalda de flores de loto, con sus atractivos miembros (corporales). Él estaba cantando en medio de una multitud de mujeres jóvenes, bebiendo licor varuni, con sus ojos embriagados y con un brillo corporal como el de un elefante en celo.” (Bhag. 10.67.9-10).
6 “Las Leyes de Manu claramente especifican que el sexo fuera de las fronteras del matrimonio, aun aconsejado por el dharma, no se debe tolerar en una sociedad ordenada. Sin embargo, mientras que las Leyes de Manu presentan una visión rotunda de la ética social basada en la jerarquía de castas, existen sutilezas en el dharma que se acomodan a la diversidad de las situaciones humanas. Por ejemplo, la práctica del sexo fuera del matrimonio, restringida por consideraciones de casta, es claramente incorrecta, pero surge la institución del matrimonio gandharva* provisional para satisfacer el deseo… Dharma, la ley moral universal, debe adaptarse a las situaciones humanas y a la realidad cotidiana del cabeza de familia”. –––– Gavin Flood, “El Hinduismo”, pp. 85–86, Ediciones Akal, S. A. 2008
* Matrimonio que se contrae por mutuo consenso (sin arreglo económico previo entre los padres) y sin formalizar (sin casarse mediante la complicada ceremonia de matrimonio hindú).
Con respecto a las situaciones humanas, El Kama-sutra de Vatsyayana, que se toma popularmente por un manual de posturas sexuales, ofrece una mirada hacia las costumbres sexuales, la moral sexual y las reglas sociales que prevalecían en la India del periodo Gupta, entre el siglo I y el siglo VI.
7 Varamukhyabhih “acompañados de cortesanas bien vestidas”. (Cfr. Bhag. 9.10.35-38). Con respecto a las situaciones humanas, El Kama-sutra de Vatsyayana, que se toma popularmente por un manual de posturas sexuales, ofrece una mirada hacia las costumbres sexuales, la moral sexual y las reglas sociales que prevalecían en la India del periodo Gupta, entre el siglo I y el siglo VI.
8 El sufrimiento que hay en el mundo se debe a la búsqueda desenfrenada por la complacencia. Los niños indeseados abandonados, las enfermedades de transmisión sexual, la prostitución ilegal de menores, el consumo de drogas, etc., son los resultados de esa búsqueda. El deseo intenso que nace de rajas, cuando no puede satisfacerse se convierte en frustración, en cólera que lleva a realizar acciones negativas. (Cfr. Bg 3.37).
9 Hare Krishna Movement Details Past Abuse at Its Boarding Schools, New York Times, 1998. Enlace aquí.
9 Hare Krishna Movement Details Past Abuse at Its Boarding Schools, New York Times, 1998. Enlace aquí.
la sexualidad es un tema sin ponerlo como el acérrimo enemigo en el entendido de Dharma el problema es los prejuicios de época de la sociedad que imparte los conocimientos sobre Sanata Dharma, del pasado , del pesente y de lo que vendra. Efectvamente Swamiji es muy evidente su tendencia hacia su propio entendido de sexualidad y de interpretación sobre la literatura antigua de India la pureza y la sexualidad no estan en riña. En el Sanata Dharma si se rigen con un acto de conciencia hacia lo divino son armonía. El problema es que en esta época es dificil hacer una armonía cuando la sexualidad se ha convertido en consumo sexual solo se ha convertido en una moneda de compra y venta, y donde se convierte la sexualidad en los demonios de una mente debil carente de principios concretos.
ResponderEliminarsi la represion de los deseos llevan a la promiscuidad,entonces todo el baghabad gita maestros indu y de todas las religiones llevan a la promiscuidad...ellos son los que la originan y no ninguna sociedad promiscua..
ResponderEliminary cuál es tu amigo amigo imaginario Jorge?, digo, el personaje de cuál mito es tu dios?
ResponderEliminarMe pregunto donde queda el Instinto. Del hombre como animal que es? Porque los Dioses no se ahorran tanta pendejada y nos exterminar si nada les gusta.?
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